Los castros son uno de los elementos patrimoniales más característicos de nuestra tierra y uno de los emblemas más antiguos de nuestra historia. En estas aldeas fortificadas se refugiaban los antiguos habitantes de lo que pasó a llamarse Galicia, en casas circulares de una sola habitación. Solían estar ubicados en lugares estratégicos, preferiblemente altos y muchas veces inaccesibles, malos para atacar y buenos para defender.
Estas son algunas de las cosas que podemos contarles a los más pequeños sobre nuestra antigua cultura cuando visitemos los Castros de Santa Tecla, cercanos, en el municipio de A Guarda. A pie o en coche, seguro que se les ocurrirán muchas más preguntas sobre estos pueblos únicos. Justo en la entrada, hay una réplica de estas antiguas construcciones con vestíbulo, horno… Además podemos caminar por el asentamiento, caminar por calles que diferenciaban barrios o ver los canales que llevaban agua de lluvia para almacenar. ¡Será como vivir una aventura de exploradores! Justo en la cima de la montaña, hay una cafetería para reponer fuerzas y podemos visitar el Museo Castro, desde el cual saldremos un poco más conocedores de nuestros antepasados. La historia es mucho más divertida cuando se cuenta in situ.
Monte de Santa Tecla (A Guarda) | Das 10.00 h á 20.00 h aprox. | 1,00 €